9.28.2008

El Ki


La palabra japonesa Ki,tiene un significado que es muy difícil de traducir a nuestro idioma; aunque se toma como energía vital o cósmica, se refiere a la energía externa existente en el cosmos que llega a todos los seres vivos por medio del aire, la tierra, el agua o la comida, etc. El Ki es la vida, mientras el Ki exista la vida continua,constituye la potencia original que se manifiesta desde la creación del universo siendo esta energía independiente al tiempo y al espacio.
En la cultura oriental esta energía es respetada y creída por todos y conocida desde hace miles de años, en el Japón como ya he nombrado se llama Ki; en la China, Chi y en la India, Prana.
En japonés, Ki se refiere a una fuerza orgánica que puede tomar miles de formas; puede describir el clima,la personalidad de un individuo o esas vagas simpatías y sensaciones que todos alguna vez experimentamos.
La mente y el cuerpo son uno,la mente es como la fuente del arroyo y el cuerpo es el canal por donde bajaban las aguas del arroyo,estas palabras, significan que la mente llevaba al cuerpo sería incapaz de dominar la mente de un rival si al menos no tenía el mando completo sobre su propia mente.El verdadero conocimiento estaba en la unión del cuerpo y la mente.
En las artes marciales esta unión posibilita el surgimiento del Ki, pero para llegar a este estado avanzado de conocimiento deben de haber quedado atrás unos cuantos años de entrenamiento y el esfuerzo de muchas gotas de sudor absorbidas por el cinturón que cierra nuestra chaqueta de Karate.
El poder de cualquier técnica se triplica cuando se utiliza el Ki, sí se concentra todo el ser en conjunto en la acción ya sea al atacar o al defender, el Ki explota y puede hacer cosas sorperndentes.Se debe comprender que esta es la única enseñanza que demora años en interiorizar y aprender a profundidad y que vale la pena esperar. Mientras la mayor parte del entrenamiento se fundamenta en las habilidades físicas; algo no cuestionable, pero siempre se debe dedicar unos cuantos minutos a los aspectos espirituales. Si difícil resulta concentrarse y canalizar el Ki estático, pues en movimiento,en pleno duelo es una tarea casi imposible realizada por verdaderos maestros. Allí es donde se encuentra la maestría suprema.
Fuente:web