12.27.2020

Sobre el fin último del Kata

 


Sobre el fin último del Kata

Hay una palabra que define todo aquello que se quiere conseguir con el estudio de un Kata, y esa palabra es 解 KAI que se traduce como : Entender, comprender.
El Kata es, se ha dicho muchas veces, todo un tratado encriptado que hay que descifrar para entenderlo, para comprender.
Tiene el Kata, especialmente algunos Katas muy determinados, tanto mensaje oculto por descifrar que detrás de ellos está el sentido de la Vida.
Enfrentarse con un Kata, no es solamente ejecutar sus diferentes técnicas siguiendo un embusen como si fuesen una mera coreografía con determinados ritmos que se cambian al antojo del ejecutante sin tener en cuenta su Hongi 本義 , que viene a traducirse al español como Significado original.
En Kata, sea cual sea su procedencia o transmisión, es muy importante para poder entenderlo que se enseñe respetando su Sentido original, su Hongi 本義.
Y esa es la razón fundamental por la cual algunos grandes Maestros se rasgan las vestiduras cuando contemplan como se enseñan actualmente algunos Katas, sin respetar su Sentido Original, y buscando por encima de todo lo demás la estética, la espectacularidad en el gesto grandilocuente y exagerado.
Hay varias formas de enfrentarse al estudio de un Kata, la primera de ellas es la de conocer su contexto, quien lo creó, cual fue su origen, cuáles son las características principales : Movimientos, orden, embusen y ritmo de ejecución.
La siguiente es la práctica diligente, la repetición, la práctica de sus técnicas unitarias por separado hasta perfeccionarlas, ensamblar todo el conjunto, y progresar en las sensaciones que esa práctica va generando.
Pero cada Kata tiene dentro de sí toda una ciencia del combate, de sus múltiples posibilidades e interacciones, que no es posible descubrir únicamente de una forma académica y teórica, elucubrando, sino de una forma práctica, descubriendo en el Camino cada Concepto y Principio oculto tras las técnicas. Y las sensaciones.
Los instrumentos empleados para ese descubrimiento tradicionalmente han sido tres : Bunkai, Kaisetsu y Kaishaku.
Todos ellos llevan dentro el mismo ideograma, el mismo kanji, la misma palabra, el mismo Concepto : 解 KAI, Entender, comprender.
Intentemos entonces comprender lo que BUNKAI 分解 significa, y su verdadera utilidad, puesto que en los últimos tiempos se ha puesto de moda este Concepto, está herramienta, que no significa otra cosa que separar el Kata en sus diferentes partes para estudiar cada una de ellas.
Por ello podríamos decir que BUNKAI significa: “Entender las partes”, donde: 分 BUN significa Parte, o segmento y 解 KAI, como ya hemos visto, significa :Entender, comprender lo que cada parte significa.
Se ha puesto tan de moda estudiar el Bunkai de un Kata que, dado que el Kata se fracciona en sus partes, se da rienda suelta a la imaginación de forma libre, y, a veces, ya se sabe lo que dice el viejo Adagio : El sueño de la razón produce monstruos.
Y esto es así porque, no lo olvidemos, como las piezas de un Mecano, las partes conforman un todo homogéneo. En ese sentido podríamos compararlo a la contemplación que proporciona la visión de un satélite: Tiene capacidad de centrarse, enfocarse en un detalle concreto, y también tener una visión de la totalidad del conjunto.
Desenfocando, alejándose de los detalles concretos, se gana visión de conjunto, genérica, global.
Enfocando, reduciendo el campo de visión, acotandolo, entrando a cada uno de los pequeños detalles, es posible también probar diferentes escenarios y posibilidades de respuesta. Sólo hay que ser capaces de tener la habilidad necesaria para alejarse, desenfocar, tener una visión global, de vez en cuando. Esa habilidad para tener una visión de conjunto, enfocar y desenfocar, entrar en lo concreto y contemplar a la vez lo genérico, es la que nos puede llevar a la mayor comprensión del Kata.
Contemplemos la segunda opción de estudio que tenemos : KAISETSU 解説 que significa literalmente, «opinión fundamentada», pero los diccionarios japoneses lo traducen como explicación o comentario. Donde 解 KAI, factor común a las tres formas, es entender o comprender y 説 SETSU se traduce por opinión o teoría. Así es que KAISETSU es una herramienta que ayuda a obtener una explicación sobre el Kata.
Es, siguiendo el símil de la visión cenital del satélite, tener una visión de conjunto para saber cómo funcionan y se manejan las técnicas del Kata en particular y también su ensamblaje de conjunto.
En ese aspecto KAISETSU es como el libro de instrucciones de cómo funciona realmente el Kata.
La tercera herramienta a utilizar para el estudio de un Kata es KAISHAKU 解 釈 que podríamos traducir por Interpretación, donde: 解 KAI ya sabemos que es el elemento común y que significa entender o comprender, además de 釈 SHAKU que significa explicación.
Así es que KAISHAKU es la herramienta que permite interpretar lo que se hace, especialmente las sensaciones que la práctica provoca, sensaciones de todo tipo, derivadas de lo que nuestro cuerpo recuerda, y también de lo que nuestra mente ha elaborado y sentido.
En la interpretación marcial del Kata, KAISHAKU es la herramienta que nos permite entender cada situación planteada y buscarle una explicación.

12.18.2020

Bunkai

 分解. ESTUDIO SOBRE EL BUNKAI: EL PROGRESO DE LA TÉCNICA.

De la misma forma que cuando se dice que Kata es “forma” y con esto se produce una pequeña “injusticia” al no ser del todo correcto como definición, cuando decimos que Bunkai es “aplicación” sucede algo similar. En las AAMM además, bunkai y kata guardan una muy estrecha relación. Las transcripciones literales de los kanji que componen estas dos palabras parecen quedarse “cortas” pero si profundizamos en dichos kanji, incluso la traducción literal nos da una idea más aproximada del significado de idea que se les asigna en las AAMM.

Por eso antes de comenzar a comentar sobre un término relacionado con las AAMM es aconsejable conocer su procedencia, para partiendo de su traducción literal llegar a conocer la verdadera intención o el por qué de su uso. Pero esto se hace más necesario con Bunkai, tanto por su importancia como por los determinados usos de de él se hace.

Se dice que Bunkai significa literalmente “análisis o deconstrucción”, en una idea de desmontar algo para su posterior estudio o análisis desde un punto de vista del mundo de las AAMM japonesas y haciendo referencia a las distintas aplicaciones al combate extraídas de determinados movimientos o técnicas que contiene un Kata.

Para ello vamos a realizar un pequeño pero bonito viaje por el mundo del kanji. Bunkai está formado por dos kanji: 分解.
Vayamos con el primero, 分BUN, FUN, BU: minuto, parte, un décimo (1/10 ó 0,1); wakeru: dividir, separar; wakaru: entender. Además, 分consta de dos términos 八y 刀. HACHI, yattsu (八): ocho, de todo, todas las partes… las dos líneas representan una señal de división, y como número ocho, es el número que más veces es divisible por dos, y también representa el infinito o el “todo”. Por su parte Tô (刀) no sólo hace referencia a una katana, sino también a cuchillo, cuchilla o espada e incluso a la acción de medir. Así pues tenemos que BUN (分) asume la función de “cortar, dividir, separar algo que es divisible”, si vemos el infinito como un “todo” se puede extraer la idea de “parte de un todo”… sacar de ese “todo” algo construido o formado por partes o secciones y que se pueden ensamblar y encajar entre sí y ser entendido mejor.
El segundo término, 解KAI: explicación, aflojar, desabrochar; Toku: desatar, resolver, aclarar, despedir. Este kanji también está formado por otros tres kanji o radicales: 角 (Kado: una esquina, un borde… Kaku: un ángulo… Tsuno: cuerno, asta); 刀 (Tô: espada, cuchillo); y 牛 (Go: mediodía; Ushi: vaca, buey, toro). De esta manera KAI (解) viene a decir “un cuchillo separa el cuerno de un toro” o también la acción de “cornear del toro con un solo cuerno”. Se deduce pues “explicación” como resultado de: aclarar un ángulo cortado o separado.

En conjunto Bunkai se puede entender como “explicar una parte”, “un minuto de resolución”, “parte de análisis o de descomposición” y que desemboca en “descomponer por partes”. Bunkai (de forma familiar en el Dôjô) se entiende a menudo como “aplicación” y en este sentido se entiende estrechamente ligado a Kata, ya que en mi opinión, para asociarlo a una técnica determinada quizás es más apropiado el término Kihon. Kata definido como “forma” o como “combate imaginario contra uno o varios adversarios” también sabe a poco… ya que “kata es todo”, por ello Bunkai Kata no sólo sería “descomponer por partes el kata para su estudio de análisis y de aplicación al combate” sino también como “una forma de aplicación completa del kata” de principio a fin y no sólo por partes.
Terminado este viaje por la “kanjigrafía” es momento de adentrarnos de lleno en la idea de Bunkai. Normalmente los bunkai son ejecutados por parejas o grupos. El bunkai incluye las distintas técnicas predefinidas que contienen los distintos kata como agarres, atemis, contaataques, defensas, distancias y otros movimientos aplicados a la realidad de un combate. Esto ayuda a que el practicante comprenda el significado de cada una de las acciones o movimientos del kata, y mejorar en conocimiento, velocidad, reflejos, potencia, ritmo, etc., para conseguir un mayor control y concentración en cada gesto técnico acercándonos a la situación real.
Los dos grandes “mundos o todos” de las AAMM son el Kata y el Kumite. Ambos se fundamentan el los importantes valores que cada uno contienen complementándose entre sí. Si para el Kata sus fundamentos son el Chakugan (mirada), Ki (energía interna), Kiai (grito de concentración), Hyoshi (ritmo), Enbusen (línea de realización), Kihaku (vivencia), Zanshin (alerta continua y sensación) y Kime (fuerza: concentración de la energía en un punto determinado)… para el Kumite lo son la Distancia, la Anticipación, la Defensa, el Ataque, la Táctica, la Precisión, la Estrategia, la Velocidad, el Control, la Reacción, los Desplazamientos…
Mientras el Kumite o Combate trabaja todas estas cualidades que hacen del practicante gane o progrese en esas habilidades, digamos la parte externa o Yang de la persona, el Kata viene a resultar como esa “caja mágica” que guarda y preserva esas cualidades adquiridas en unos fundamentos más internos, más profundos… más Yin. Entonces, el Bunkai juega un papel muy especial ya que ejerce una cualidad de nexo entre ambos conceptos. Kata, unilateralmente, sólo serían unas formas que preservan todas las técnicas y significados del Arte Marcial que con el tiempo quizás se volverían “reliquias” cuyo sentido y propósito llegaría a perderse… Mientras que el Kumite, de igual manera unilateral y sobre todo con la aparición de la competición deportiva, iría simplemente avanzando en aquellas técnicas más eficaces de cara al enfrentamiento, quedando en el olvido muchas de ellas por su dificultad aplicativa.
Bunkai pues se convierte en el medio por el cual se analizan, explican, desgranan y se les da valor aplicativo de cada acción del kata para ser utilizada con efectividad y propiedad en el combate. Y en sentido contrario, una vez que consigues aplicar e integrar todo esto en el combate, terminas potenciando y vigorizando los conceptos fundamentales del kata. Una simbiosis muy estrecha pero de profundo alcance que se desarrolla en ese “medio, círculo o vacío” que es el Bunkai y que desemboca en el adecuado progreso del practicante.

En el estudio aplicativo de los kata, nos encontramos con diferentes tipos o clases de Bunkai como son el Ôyô kumite, Bunkai kumite, Henka kumite y los Shoden-chundan-okuden bunkai. Mientras las tres primeras clases de bunkai descritas harían referencia a la forma (clases de bunkai), la última (divida en otras tres) lo harían en referencia a la didáctica (grados de enseñanza). El avance en cada uno de los tipos del bunkai te da la opción de tener respuesta a cada una de las acciones que se desarrollan en el kata; la vivencia, el ritmo, el zanshin, el kime, etc., dependen de ello y ayudan a sentirse “cómodo” a la hora de la ejecución del kata pues aprendes a discernir o saber “para que sirven” pues haciendo caso omiso de ello, el kata se convertiría en un ejercicio sin vida, rutinario y monótono.

ÔYÔ KUMITE 応用組手
応Ô, YÔ, responder, reaccionar, atender; respuesta, contestación, responder para; regreso, retorno, vuelta, devolución. 用YÔ, mochiiru, utilizar, usar. 応用 Ôyô, aplicar. 応用組手 Ôyôkumite, combate aplicado, “libre literalmente para aplicar al combate” . En ocasiones en lugar de ôyô kumite, podemos ver ôyô bunkai (análisis aplicado o aplicar la aplicación) pero en ambos casos se trata de lo mismo, quizás ôyô bunkai suene algo redundante.

Ôyô kumite, es el Bunkai libre, el que interpretamos todos de manera personal, basándonos en los principios fundamentales del kata. Nuestra interpretación del kata, donde podemos aplicarlo con unas intenciones o desplazamientos distintos, etc. Es la aplicación de la técnica en una circunstancia específica sólo cuando se comprende el buen proceso del bunkai al que se puede acceder, es decir, tomando como ejemplo un shuto-uke, que aplico dentro del kata como defensa, yo luego lo puedo aplicar de otra manera… shuto uchi como ataque golpeando el hombro, etc. No es para lo que está concebido en el kata, se trata de un análisis libre.
Ôyô kumite es utilizar las técnicas del kata para realizar otras aplicaciones, que no es lo mismo de “Tokui kumite” que es la aplicación favorita o la que a mí me apetece sin tener en cuenta los principios del kata.
El objetivo final de la enseñanza Ôyô es crear tantas posibilidades para el practicante con el fin de desarrollar múltiples opciones con las que pueda protegerse o instruirse. En resumen, Ôyô, nos enseña a entrenar y defendernos de una manera de forma natural e instintiva.

BUNKAI KUMITE分解組手

Este trabajo es la aplicación establecida por el maestro y/o escuela de un modo específico para dar unas explicaciones a las técnicas, es decir, es… el “para que es” cada una de las técnicas que conforman el kata desde el punto de vista u objetivos de su creador, ya que cada maestro, diseñó estas series de técnicas con un objetivo aplicativo determinado.
En determinados momentos de ciertos kata, su bunkai-kumite no parece muy complejo, pero si requiere de un trabajo pormenorizado de las directrices marcadas por su creador y prestar atención a algunos aspectos más profundos que pudieran existir; en cambio, pueden existir ciertos movimientos o gestos técnicos de mayor dificultad en le kata, entonces es cuando un conocimiento del Bunkai Kumite ayuda al estudiante a una mejor comprensión de los mismos, que revierte sistemáticamente en el aprendizaje del kata, sobre todo en la etapa de memorización, creando una buena base para etapas superiores como por ejemplo la de interiorización del kata.

En algunas escuelas, de los kata básicos formalizan un interesante trabajo enfocado hacia el combate preestablecido o Yakusuku Kumite, desarrollando técnicas importantes de esos kata con mucha posibilidad de evolución del practicante, como por ejemplo sucede con los cinco yakusuku kumite de los Pinan Kata en la escuela Shito Ryu.

En Nanbudo, tambíen Bunkai Kumite (llamado comúnmente Bunkai Kata) es una secuencia de técnicas de combate que desarrollan los movimientos de los kata cara a una vivencia real, que presta una ayuda inestimable al practicante para comprender el significado del kata y, además a desarrollar la velocidad y reflejos. Cuando se alcanza cierto nivel, se incrementa en el Bunkai kumite la fuerza, velocidad y ritmo lo cual revierte a adquirir una mayor concentración en el practicante. Todos los kata tienen su Bunkai kumite en el Nanbudo, siendo todos ellos creación de Doshu Soke Yoshinao Nanbu, fundador de la Escuela.

HENKA KUMITE 変化組手.
変化(変Hen, “cambio”; 化Ka, “cambio en”) Henka: cambio, variación, alteración, mutación, transición, transformación, metamorfosis; variedad, diversidad; inflexión, conjugación. Hace referencia en general a un cambio en algo como por ejemplo el kata, para transformarlo o conjugarlo con otra como el kumite… una declinación del kata para mutarlo hacia el combate.

El Henka Kumite son variaciones del bunkai en las cuales hay otras opciones o conclusiones prácticas de la misma, kata de otros practicantes o de otras escuelas. En ocasiones podremos ver como un determinado gesto técnico (un shuto-uke, por ejemplo) tiene distintos objetivos, según sea trabajado de forma diferente por los diversos estilos, tendremos que puede ser utilizado como una técnica lineal, una técnica para atacar y/o defender, una técnica envolvente para realizar una luxación posterior, etc. Un gesto técnico o serie de ellos en el kata está concebido “para lo que es”, después, ese gesto o conjunto de ellos, podrá tener su yakusoku-kumite que el maestro de ese kata ha diseñado. Pero aquel shuto-uke del ejemplo, en otras escuelas lo pueden trabajar de otra forma y/o en otra concepción. Podemos explicar este ejemplo, y podemos hacer que eso sea practicado porque a lo mejor eso nos hace entender mejor lo que ya practicamos. Pues al ver la diferencia entre esas técnicas que realizan en otros estilos, vamos a poder entenderla mejor, naturalmente, en el caso de que ya lo tengamos bien asimilado en nuestro estilo. Esta fase, tiene una relación directa con la del Shoden, Chuden y el Okuden.
Los grandes Maestros no paran en recabar la importancia del Henka Bunkai; recientemente, uno de ellos me comentó sobre su importancia: “es muy conveniente conocer el Henka bunkai del kata en determinados momentos pues resulta enriquecedor conocer como en otros estilos se aplican determinadas técnicas a fin de comprender más profundamente como nosotros las aplicamos… pero esta idea no sólo debe orientarse al kata, es interesante conocer también como son explicados otros conceptos, pues con ello se engrandece nuestra idea”. Mabuni Kenwa también se expresó de forma parecida: “El practicante no ha de encerrarse en unos kata determinados. Debe estar dispuesto a conocer todos los posibles, porque a la luz de los nuevos kata, los antiguos cobran una nueva realidad. Es bueno conocer diversas escuelas y distintas tradiciones para poder tener así una visión adecuada y correcta del conjunto. Si no conoces otras escuelas nunca sabrás los vicios ni las virtudes de la tuya propia”.
Es triste observar como a veces no se presta la importancia debida al Henka Bunkai, ya que distintos bunkai de otras escuelas pueden ayudar a comprender momentos difíciles de interpretar en el kata del estilo practicado habitualmente, fortaleciendo tanto el Bunkai kumite como el Oyo kumite, y no sólo es positivo de cara al practicante, sino de manera muy especial para el docente.

SHODEN, CHUDEN Y OKUDEN BUNKAI. 初伝、中伝、奥伝分解

Quienes prefieren traducir Bunkai como “explicación”, se basan en que Bunkai es una contracción japonesa de “Bun bu kai setsu” (o sea, “los principios de separación entre el conocimiento intelectual y la habilidad marcial”) y que muchas veces es entendido como “aplicación o explicación”, que es referido a los principios de aplicación de un kata. En Okinawa, se utilizaba el término “Ti chi ki” y claro, en aquella época turbulenta casi todo se hacía en secreto, hacía referencia al “secreto del karate de Okinawa”, cuyo estudio se dividía en tres partes: Shoden, Chuden y Okuden.

• Shoden. 初 (Shô, comienzo, inicio, primera) 伝(DEN, transmitir) Primera licencia de transmisión. Es el nivel principiante, el de la técnica fundamental. Shoden es el nivel de técnica fundamental que aprendiza la parte obvia. La parte obvia es, “para qué sirve” esa técnica. También llamado “Omote” (superficial). Cuando se realiza un kata, la forma más simple y directa de interpretar su aplicación y verla en su forma más obvia, aunque resulte lejana al Bunkai del Maestro creador, es la que se aprende en el presente momento. Aquí, en el nivel Chuden, en las técnicas de atemi, por ejemplo, predomina simplemente el concepto de acercarse, atacar y retirarse.
• Chuden. 中 (Chû, medio, centro, segundo nivel) 伝(DEN, transmitir). Segunda licencia de transmisión. Nivel intermedio de la técnica. Denominada igualmente “Ura” (parte de atrás) del Bunkai, es la parte que contiene un nivel más dificultoso en la comprensión de la aplicación. Aquí comienza a estudiarse los principios del “cuerpo a cuerpo” y la direccionalidad del atemi (buscar zonas más vulnerables del cuerpo) en pos de una mayor efectividad, esto es, la aplicación directa. Chuden, es el segundo nivel, o de técnica intermedia. Segundo y tercer nivel de atemi y kyusho. Verdaderamente, antes en el nivel anterior, sólo nos preocupamos de qué gesto técnico utilizar y que éste era dirigido a un punto o zona generalizada. Aquí, en este segundo punto, llegamos a intentar intervenir y que sea justo en el “sitio exacto” (encima del hueco de…, que queda entre ésta o aquélla costilla…etc.) porque es “punto débil”. El trabajo ya, que podemos hacer, es la concatenación de las técnicas (shuto-uke… jodan uraken-uchi… luxación y/o amplío a la estrangulación…, por ejemplo).
• Okuden. 奥 (Oku, oculto, interior, atrás, de corazón, sentimientos verdaderos) 伝(DEN, transmitir). Licencia de transmisión interna. Nivel avanzado o de transmisión oral. Ahora ya se utiliza un uso más elevado de los principios de movimiento de acción y reacción del cuerpo humano: el llamado “arte de golpear”. Normalmente, en este nivel se guardan las técnicas secretas o más comprometidas de la Escuela. Okuden es además del nivel de transmisión a las tradiciones, el ampliar conocimientos sobre los puntos Kyusho o Tsubo (en principio, ambos son los mismos, con la diferencia de la intención: denominan Kyusho cuando la idea es la de dañar y Tsubo cunado lo es la de sanar), la utilización de sonidos (con los mismos sentidos de intención mencionados), los trabajos energéticos, etc. Pero llegado a este nivel tan complejo resulta de vital importancia la adquisición de conocimientos sobre anatomía y salud, y en esto la Medicina Tradicional China, que siempre ha estado muy estrechamente relacionada con las Artes Marciales, es una fuente importante de conceptos que deben ser al menos básicamente conocidos como: las teorías Yin-Yang, de los Cinco Elementos, circulación de energía (meridianos, centros energéticos, puntos Tsubo), conceptos base de la respiración (abdominal, inversa, condensada, órbitas micro y macroscópica, etc.), kuatsu, primeros auxilios, etc. En general, considerar que es lo que está detrás de las técnicas del kata de nuestro arte marcial: ¿hay algún tipo de trabajo especial en ese determinado kata que no sea lo puramente físico?

Shoden, Chuden y Okuden bunkai coincide con la filosofía del Shuhari (守破离), que describe las etapas del aprendizaje en el Budo, así como para el mundo empresarial e industrial. Shuhari se entiende como: primero aprender, después desmontar (para analizar o explicar más profundamente), para finalmente transcender.
Fuente::koryubudo.blogspot.com

12.09.2020

Genesis del Arte

 Génesis del Arte

En cada dominio del arte tradicional japonés, la expresión kami wasa (literalmente: “la técnica [wasa] “del dios” [kami], designa una técnica aparentemente perfecta o, al menos, cercana a la perfección.
Esta expresión transmite una admiración y un temor hacia el técnico que aplica el arte de una manera un tanto familiar, porque se trata de un arte extendido, como inaccesible, porque la diferencia de su nivel perece infranqueable. El simple hecho de unir ambos términos, dios y técnica, ya parece explícito.
Hoy en día, el animismo todavía puede percibirse en la religión shintoísta de Japón, la cual apareció en el transcurso del dominio del poder imperial hace unos 1500 años. El shintoísmo fue la primera religión de Japón en adoptar una forma global apoyada en la política. A medida que iban avanzando las conquistas imperiales sobres las tribus locales, el poder hacia que los conquistados incorporaran el shintoísmo a sus creencias, organizando así el mundo de los dioses, según un modelo jerárquico. El primer documento que describe esta cosmogonía data del año 712 d.c. No obstante, al proponer una multitud de dioses vinculados a los elementos naturales, el shintoísmo también integro las creencias animistas locales, las cuales estaban fuertemente unidas a la naturaleza.
Todavía, hoy en día, sobre todo en el medio rural, este pensamiento es muy fuerte y el shintoísmo conoce importantes variantes locales.
Un árbol o una roca asombrosa, una montaña, un rio, un bosque, el viento o el sol, los animales, las diferentes partes de una casa, los elementos naturales, todos los lugares de la vida, etc. todavía son venerados debido a la creencia que están animados por la existencia invisible de dioses, buenos, malos y malvados.
Cuando consideramos el Japón bajo su aspecto moderno e industrializado, uno no pude hacer otra cosa que sorprenderse ante la persistencia de estas creencias animistas.
Por esta razón es muy común ver un templo shintoísta en lo alto de un edificio de una gran empresa ya que se cree que el templo traerá paz y prosperidad. También es común que antes de la instalación de una gran empresa los sacerdotes shintoistas purifiquen el terreno y apaciguen a los dioses, de la misma manera están presentes cuando zarpa un barco, por ejemplo.
Detrás de esta actitud, la tendencia a practicar una técnica a la manera de un dios, no es difícil encontrar fundamentos animistas. La técnica perfecta se considera la de un dios precisamente porque es perfecta. Sin embargo la persona que llega a dominar esta técnica no es considerada como una divinidad, el carácter divino se vincula a la técnica en sí, en el momento de realizarse y también al individuo en el instante que la realiza.
Para los japoneses, la perfección, es humana y esta idea parece estar fundamentalmente unida a las técnicas de cada dominio artístico, arreglos florales, ceremonia del té, jardines en miniatura, pintura, caligrafía, artes marciales, etc.
En el momento dela perfección más elevada, el hombre alcanza el ritmo de “la respiración del universo”. En las artes marciales a través de las técnicas de combate, el practicante alcanza la concordancia entre sí mismo y “la energía del universo” (ki en japonés). Tener un acceso directo a esta energía es lograr el último estado del arte del combate y franquear una etapa de la evolución personal.
Desde esta perspectiva, la kata no se considera algo subordinado a la inteligencia: el hombre en su totalidad se refleja en la técnica y es entonces cuando podemos afirmar que la técnica es el hombre.
Después de la apertura de Japón a finales del siglo XIX, la modernización impuso una ruptura en la concepción de que el hombre y le técnica siempre están en el mismo plano, de hecho la kata representa una eficacia técnica si esta se preserva de toda escisión intelectual sin el desequilibrio en el que se apoya el pensamiento científico y tecnológico moderno.
La concepción occidental subordina la técnica al arte o a la ciencia, la técnica aparece como un medio. La escisión entre ciencia y técnica se desarrolló con la división del trabajo en el sistema de producción capitalista. La relación entre el ámbito de las ideas y el ámbito técnico ya no es tan evidente, esta necesita una mediación que debe establecerse constantemente.
En Japón actualmente, coexisten dos concepciones de la técnica, de hecho, por eso encontramos dos traducciones posibles al japonés del término técnica:
-El termino Gi Jutsu , que corresponde a la concepción occidental, se establece a fines del siglo XIX y se designa para designar a la técnica en la producción industrial.
-El termino Wasa , que ya hemos mencionado, designa la técnica en el ámbito de las artes. En esta acepción, el hombre está presente en la técnica, ésta no se concibe como un medio para realizar algo fuera del individuo: la meta no es distinta a la técnica, el hombre crea la técnica y la técnica crea al hombre.
La técnica (wasa) está vinculada al cuerpo, el pensamiento y el acto físico no están muy separados y entre ambos no existen subordinaciones, la realización es decisiva en un momento de intuición en el cual, el cuerpo y la mente se funden.
La reflexión lógica no está ausente en la técnica en el sentido de wasa , pero está limitada por la manera de proceder, por ejemplo , el artesano que fabrica un sable tiene el tiempo de reflexionar o calcular mientras golpea, pero en el momento del temple del acero o el momento del acabado dela hoja, requieren una atención enorme. El artesano debe captar el momento en que él y el objeto que trabaja son uno. Lo mismo ocurre en la caligrafía, la pintura, la escultura, la alfarería, puestos que estas actividades se desprenden de instantes decisivos e irreversibles- marcados por un tipo de respiración- en los cuales el artesano y el objeto se funden.
En una cultura donde las personas conciben la técnica en el sentido de Wasa, la perspectiva lógica supera difícilmente el ámbito del cuerpo. Los esfuerzos del hombre técnico tienden, de hecho a fusionar pensamiento y acción, a vivir la unión perfecta entre ambos. La “técnica de dios” únicamente puede proceder de esta fusión.
No hay ninguna duda que esta concepción del hombre y de la técnica ha contribuido a frenar el desarrollo del pensamiento lógico en Japón.
En la técnica en el sentido de Wasa, el hombre y sus gestos tienden a ser indistinguibles, pero lo que da su especificación es su alto nivel de perfeccionamiento cualitativo en la realización.
Fuente: Las Katas- Kenji Tokitsu 
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11.09.2020

Tokusan

 

Tokusan vivía en el montañoso distrito noroccidental de China, donde llevo a cabo durante algún tiempo, estudios académicos sobre el budismo.

Consiguió ser una autoridad sobre el Sutra del Diamante ganándose el reconocimiento público por su erudición. Un día oyó contar que, en el sur de China, los Budistas Zen habían alcanzado una gran influencia hablando acerca de “la transmisión más allá delas escrituras y no confiando en la letra”. Eso no podía ser aprobado por los eruditos. Tokusan se sintió indignado ante tales enseñanzas, dado que era orgulloso y confiaba en su capacidad como filosofo budista declaro:

-“Voy a destruir la madriguera de esos demonios del Zen y a exterminarlos”

Acto de seguido este defensor del Sutra del Diamante emprendió un viaje hacia el sur, llevando todas las notas y escritos que había recopilado durante sus largos años de estudio del Sutra del Diamante. De alguna manera un ser humano no puede sentirse completamente satisfecho con solo en entendimiento  o el conocimiento intelectual, en lo más profundo de su personalidad siente que falta algo.

Esta búsqueda interior y profunda es lo que llamamos la verdadera investigación religiosa. Tokusan en ese momento, empezaba a dar el primer paso en el entrenamiento religioso. Para ese entrenamiento, el impulso o búsqueda interior es absolutamente necesario.

Tokusan planeo primero ir a Ryotan en la China central, puesto que allí vivía, en una montaña, un famoso maestro Zen llamado Soshin. Cuando llegaba al pie de la montaña encontró una casa de té al borde del camino y pensó que debía comer algo antes de escalar la montaña. Entró en la casa de té y se lo pidió a vieja mujer que había allí “Comer algo en chino es tenjin que significa literalmente “iluminar la mente”. Pero la vieja mujer de la casa de té no era una mujer común, le pregunto a Tokusan:

-“¿Qué llevas en la mochila?”

-“¡Ah, sí”, replicó Tokusan “llevo un valioso Sutra llamado el Sutra del Diamante”

Ante esto la actitud de la vieja señora cambió.

-“¡Con que es eso!”, dijo ella “Entonces tengo que preguntarle algo, si eres capaz de responder, te daré de comer”, sin embargo, si no me das una respuesta satisfactoria, lo sentiré, pero tendrás que marchar sin haber comido.”

Como ya dijimos Tokusan era un erudito muy orgulloso y autosuficiente, replico:

-“De acuerdo, puedes preguntarme lo que sea”

Así que la mujer dijo:

-“En el Sutra del Diamante está escrito que: “La mente pasada es inalcanzable; la mente presente es inalcanzable y la mente futura es inalcanzable”. Tú mismo dices que vas a iluminar tu mente. ¿Cuál de ellas vasa iluminar?

Tokusan fue incapaz de responder la pregunta de la anciana.

“las tres mentes inalcanzables es un famoso pasaje del Sutra del Diamante en que la experiencia satori comienza en relación con el tiempo, el tiempo religioso o tiempo interior, en contraposición con el tiempo físico. Como un buen erudito, Tokusan podría haber explicado la inalcanzabilidad de las tres mentes, desde un punto de vista intelectual lo filosófico. Sin embargo la anciana señora no le pedía una explicación lógica acerca de ellas. Ella lo que quería era ver la verdad de las “Tres mentes inalcanzables” en el hecho real de comer, lo que hacía era definitivamente preguntar algo desde una perspectiva diferente.

Desde el punto de vista del Zen, la pregunta de la anciana sirvió para despertar la investigación religiosa o búsqueda espiritual de Tokusan, que había estado desarrollándose dentro de él, sin que él mismo se diese cuenta. La verdadera búsqueda de la felicidad, por parte del hombre, siempre se dirige hacia el exterior, es decir, hacia el campo científico. Puede dirigirse hacia adentro, constituyéndose así en una investigación espiritual muy significativa.

Tokusan tuvo que admitir su incapacidad de dar respuesta y a sugerencia de la anciana de la casa de té, tomo la determinación de estudiar Zen con el maestro Ryotan. No se sabe cuánto tiempo estudio con Ryotan o que proceso de investigación interior experimentó. Lo que es cierto, sin embargo, que la búsqueda espiritual que apareció en su interior debió llevarlo a un estado de extrema necesidad. Creo que en occidente dicen que “la necesidad del hombre es la oportunidad de Dios”

Tokusan debió llegar precisamente a este tipo de necesidad.

Fuente: Las flores no hablan de Zenkei Shibayama.

 

 

11.01.2020


 

Las  Artes Marciales y el encuentro entre oriente y occidente

Contrariamente a los que algunos autores afirman, el estudiante de artes marciales no desarrolla espontáneamente y paralelamente una filosofía peculiar  de la existencia. En las sociedades tradicionales, sin embargo, este encuentro entre la práctica y una filosofía vinculada a la misma tenía lugar en forma natural. La compartimentación social la eclosión de una sociedad especializada ha permitido la diferenciación. Asimismo la importación hacia occidente de las disciplinas guerreras orientales ha dado lugar a transformaciones en las mismas, como su integración a los ámbitos puramente deportivos, su aplicación como sistemas de defensa para las fuerzas del orden público y grupos militares de elite, etc.

Sin embargo determinados valores morales si han traspasado la prueba  de la aculturación  de dichos sistemas guerreros y algunas de las virtudes tradicionalmente  atribuidas a la práctica de esas disciplinas, han sido capaces de permanecer  ocultas dentro de las estructuras rituales que acompañan la práctica de las artes marciales. Si bien estas actitudes a desarrollar mediante el aprendizaje son pocas y más formulas morales que actitudes puramente espirituales o filosóficas, han colaborado benéficamente en la buena imagen social de la práctica de artes marciales. De entre estas virtudes debemos destacar, el respeto y la jerarquía y la práctica que se transmite a través de las formas, como el saludo, la constatación de los limites personales a través del esfuerzo, del contraste en el entrenamiento, en los combates entre compañeros y determinadas formas y actitudes sociales relacionadas con la higiene personal y las buenas maneras, que tanto los maestros como el grupo se encargan de marcar dentro del mismo.

No queremos plantear  una actitud añorante de los “mejores tiempos pasados” o justificar actitudes puritanos  del todo anacrónicas. Hoy podemos afirmarlo sin duda, un gran valor cultural y unas filosofías con un contenido verdaderamente útil para el desarrollo del practicante, en el conjunto de tradiciones orales y escritas  del mundo de las artes marciales de oriente. Debemos afrontarlas, sin embargo, debemos enfrentarlas desde una perspectiva plenamente nuestra, claramente occidental y esto esencialmente significa, plantearlas desde la perspectiva del individuo, el más alto concepto de occidente ha desarrollado y trabajar en esa dirección que ya marcaron nuestros ancestros griegos con aquella inscripción  que coronaba la entrada del pórtico del oráculo de Delfos -”Gnoscete ipsum”- (conócete a ti mismo).

No debemos pues temer a las transformaciones dentro del ámbito de las escuelas o estilos y afrontar con valentía el hecho de todo es susceptible de empeorar, pero también lo es de mejorar. La aplicación de la razón, otra de las características, junto a la tecnología, propia de nuestra cultura actual, deben enriquecer en lugar de mermar, el legado recibido de oriente. Para mantenerse vivas las artes marciales, deben cambiar necesariamente, si bien este cambio no debe, desde mi perspectiva, significar olvido, sino un desarrollo, un enriquecimiento y un espacio para el encuentro entre oriente y occidente, entre pasado y futuro.

Fuente: Libro  El ultimo horizonte del Budo

10.19.2020

Evolución de las escuelas Shorin Ryu y Goju Ryu de Okinawa.


 

Evolución de las escuelas Shorin Ryu y Goju Ryu de Okinawa.

Entre 1901 y 1902 la "Primera Escuela Media" y la "Escuela Normal de Varones" adopto el karate como parte de su programa de educación física. El gran maestro Yasutsune "Ancho" Utoso fue el primero en enseñar en forma abierta al público en general y en Abril de 1901 en el "Shurijijo Elementary School of Okinawa".

En 1905 se fundan los siguientes clubes de karate en la isla: Okinawa Ken Junior High, Naha City School of Commerce, Okinawa Ken Trainers School, Prefectural Agricultural School, Prefectural Engineering School y el Prefectural Fisheries College.

Desde 1912 el karate de Okinawa tuvo un gran impacto sobre la Budokai (Asociación de Artes Marciales) y también dentro de la Marina.

En la primavera de 1912 cuando parte de la Primera Flota fondeó en Bahía de Nakagusuku (Okinawa), cerca de diez oficiales fueron enviados para entrenar `por varias semanas a la Escuela de Enseñanza Media.

En febrero de 1920  e maestro Kentsu Yabu, profesor por muchos años de dicha escuela y ex teniente del ejército, fue invitado por el gobierno de los Estados Unidos de Norteamérica para realizar una serie de exhibiciones que se llevaron a cabo en Hawái y Los Ángeles. Esto marco la primera exhibición de karate fuera de Okinawa.

En el año 1922, el emperador Seijo visito Okinawa, de paso a Europa. Un grupo de maestros okinawenses, entre los que se encontraban Chojun Miyagi, Hohan Soken y Ankichi Arakaki realizaron una demostración el 10 de Marzo de ese año.

En el año 1926, la familia real visito nuevamente Okinawa y asistió a un entrenamiento en la escuela de maestros (primarios).

En 1923 la Academia de Policía de Okinawa incorporo al karate dentro de su programa curricular y en 1940 paso a ser el arte oficial de esa academia.

El 21 de Noviembre de 1930 fue fundada la Asociación Atlética (Okinawa Taiiku Kyokai).

Hoy en día se estiman algo más de 200 dojos de karate y regularmente se inauguran otros más, sin embargo es raro ver profesores a cargo de un dojo con menos de 6º Dan.

Las escuelas más populares son Shorin Ryu, dentro de la cual existen cerca de 20 variedades, luego Goju Ryu, Uechi Ryu e Isshin Ryu. Dentro del Shorin Ryu están la Matsubayashi, Kobayashi, Kyudokan, Kenshinkan, Shobayashi y Shorinkan.

Antiguamente existían tres formas o estilos bien definidos de karate: el Naha-Te, el Shuri-Te y el Tomari-Te, de los tres el Tomari-Te era el menos expandido.

Durante el siglo XVIII, comienza a emerger el karate con características “modernas” , aunque sigue conservando sus principios de arte letal y en cierta forma , aún secreto.

Esto se realiza a través de los tres estilos más populares: El Shorin Ryu (Shuri-Te), el Goju Ryu y el Uechi Ryu (Shorei Ryu o Naha-Te).

Dentro del Shorin Ryu están los estilos Shobayashi Ryu, Kobayashi Ryu y el Matsubayashi Shorin Ryu. La diferencia entre el Shorin, el Goju y el Uechi está dado por el tipo de movimientos, enfatizan mucha velocidad y respiración normal (Shorin) con posiciones fluctuantes y agiles, en los sistemas Goju y Uechi, la respiración acompaña a cada movimiento en forma lenta, las posiciones son algo más bajas y los movimientos enfatizan la contracción muscular permanente.

En 1880 el termino karate (Manos de Tang) se popularizo ampliamente, reemplazando el de Te.

En 1905, el maestro Chomo Hanashiro (Shorin Ryu), rompió con la tradición usando nuevos caracteres cuya pronunciación también era karate, pero su significado “manos vacías”, varios maestros a su vez no aceptaron este cambio, por considerar que romper con la tradición era una sagrada afrenta al legado de los maestros antecesores.

Al poco tiempo el maestro Gichin Funakoshi también decidió adoptar el kanji o ideogramas adoptado por Hanashiro. Finalmente en 1936, un grupo renombrado de maestros que incluían a Kentsu Yabu, Chotoku Kyan, Choki Motobu, Chojun Miyagi,Juhatsu Kiyoda, Chiosin Chibana, Masahide Shiroma y Eijo Shin dieron una conferencia de prensa, auspiciada por el Ryukyu Shimpo, en la que oficialmente informaron la decisión de adoptar el término “Manos Vacías” para el arte marcial nacional de Okinawa.

Algunos maestros de karate okinawenses, así como historiadores, declaran que el karate mantuvo su estado secreto hasta 1903, otros indican que fue solo hasta 1875, cuando finalizo la ocupación japonesa y Okinawa (y el Archipiélago de las Ryukyu) pasó a ser parte del Imperio Japonés.

Fuente: Revista YudoKarate Nº 138 pagina 32 “Okinawa y China” por el Sensei Jorge Brinkman.

 

9.30.2020

 


La formación de los katas

A partir del momento en que la religión se convierte en un elemento nodal dela practica, aparece la idea de perfección. La practica del arte se funde con una manera de vivir. Para Musashi , el arte es el jalonamiento concreto de la trayectoria de su vida y de la perfección a la que aspira. Podemos situar hacia la época de Musashi la formación cultural de lo que yo denomino el modelo de kata, noción mas amplia y precisa de lo que se entiende normalmente hoy por ese termino en Japón.

"Un kata es una secuencia que consta de gestos formalizados y codificados, a los que subyace una actitud mental que se orienta hacia la realización dela vía (do). En la cultura japonesa seguir la vía, es tender por medio de la realización de una técnica perfecta, a la perfección humana accesible. Aunque el termino kata pueda traducirse en sentido literal como forma, molde o tipo, ninguna de estas palabras da buena cuenta del termino japonés que designa un conjunto de formas codificadas por medio delas cuales se han fijado conocimientos mas amplios (...). Existen katas en todas las formas de arte tradicional japonés, pero son las artes marciales las que nos dan los ejemplos mas precisos y estrictamente formalizados de katas...

Un kata puede estar formado por la formalización de una sola técnica o por la combinación de varias. Algunos katas son breves, aparentemente simples y precisos, como los de karate, otros muchos mas largos. En una primera aproximación podemos decir que en las artes marciales, un kata es la transposición codificada de un combate entre varios adversarios. A partir de una situación de partida siempre distinta, se encadenan técnicas de ataque y defensa e respuesta a los supuestos movimientos de los adversarios."

El aprendizaje de un kata se basa en la repetición de gestos técnicos codificados de forma precisa. Según la la disciplina y la forma del kata, el entrenamiento se hace solo o con un compañero y se centra en la atención en los encadenamientos, al mismo tiempo que se busca la perfección técnica. En el periodo Edo se trataba de un simple gesto técnico ( por ejemplo , una técnica de pegada de sable), cuyo numero de repeticiones diarias era de varios miles, cosa que algunos adeptos contemporáneos continúan haciendo. Se trataba de secuencias complejas cuya orden de magnitud era de unas cuatro a cinco horas diarias. de repeticiones consecutivas.

La repetición implica progresión:

"El trabajo de un kata pasa por varias etapas que duran varios años, incluso toda la vida. En principio cuando se aprende un kata hay que crear la automatización de una serie de gestos que pretenden la realización perfecta de formas y movimientos per en las artes marciales se trata de imprimir al mismo tiempo dinamismo y poder, que son elementos eficaces ...Si comparamos el trabajo de un kata con el dela fabricación de un sable, consistirá en pulirlo y aprender a servirse de él.

A partir de una situación determinada cada kata muestra la posibilidad de un desarrollo; de esta manera el kata pone en juego técnicas de ataque y defensa en respuesta a los movimientos y a las supuestas estrategias del o delos adversarios. Po lo tanto los diferentes katas proponen al mismo tiempo técnicas y aprendizaje de las estrategia...El enriquecimiento que se obtiene de este modo, mediante repeticiones sucesivas. las hace posibles, ya que la repetición de los mismos gestos no es idéntica."

Los katas que conocemos en la actualidad no son obra de una sola persona , sino la condensación de un saber tradicional. Musashi fundo una escuela, las técnicas del modelo de entrenamiento que elaboro las repitieron y transmitieron sus alumnos que veían en ello un medio a tender hacia la perfección del maestro. Sus alumnos idealizaron esas formas técnicas y proyectaron en ellas la imagen de su maestro. La codificación quedo establecida cuando fijaron el saber que habían recibido a través de ese modelo de referencia idealizado. Al mismo tiempo la sociedad entraba en una fase de estabilización y unificación de los valores feudales que favoreció ese proceso.

para las generaciones siguientes que los reciben, los katas son modelos o moldes en que basta implicarse para ser eficaz. Al implicar la propia experiencia en esos moldes, los maestros sucesivos los modifican y acumulan en ellos la suma de sus experiencias, a la manera del artista que pone en su obra capas sucesivas de laca. Así el kata, que al principio se impone como una forma rígida, posee una flexibilidad que le ha permitido perpetuarse. Así como la escuela de Musashi ha transmitido hasta nuestros días los katas formalizados por sus primeros alumnos.

Queda explicar por qué el kata, que se basa en la repetición, es un modelo de acción que durante generaciones ha servido de soporte a una implicación de tamaña intensidad.

El kata es la forma que sirvió de relevo y catalizador al desarrollo delas artes marciales japonesas a partir del periodo Edo. Los aspectos mas visibles son la repetición, la codificación y el ceremonial. Mediante la repetición, en apariencia idéntica, el adepto busca adquirir la técnica perfecta. Esta perfección es vehiculada por la imagen del maestro con el que se identifica. Cuanto mayor es el grado de identificación mayor es la intensidad de repetición, ya que en el kata el adepto se enfrenta con ese maestro idealizado l que quiere vencer. El grado de identificación es sinónimo del pode que el maestro ejerce sobre el discípulo. La repetición se convierte en cierto modo , en un proceso de lucha contra la persecución del maestro imaginado.

Al mismo tiempo gracias a la integración de las secuencias codificadas, el adepto puede llegar a olvidarse de si mismo y dejarse llevar por la forma automatizada. Dicha forma automatizada es una técnica experimentada que le asegura la eficacia. El itinerario esta trazado de antemano y el adepto no necesita gastar energia para intentar trazar un camino. Es camino es la vía.

Como no dejaba de recordar Musashi , el camino del guerrero es seguir la vía justa y el entrenamiento técnico constantes el medio de la búsqueda de perfección, pero en este caso no es una abstracción: el kata y la identificación con el maestro la concretan y la hacen tangible los adeptos. Se suele decir que Musashi no tenia maestro pero yo suscribo la hipótesis de Morita , que dice que Musashi recibió durante su infancia la enseñanza de su padre, primera figura de maestro. Luego conoció a diferentes adversarios y al combatir con ellos y obtener la victoria adquirió lo esencial de su saber.



Su adversario es al mismo tiempo su maestro y la figura compleja del maestro incluye para él la de sus adversarios pasados y por venir.

la elevada frecuencia de una practica intensa del arte marcial en los guerreros no responde únicamente a esa explicación. Ese modelo de acción se siguió debido a que encajaba en el sistema de valores sociales dominaste. El modelo del kata integra tambien la vida social de un guerrero. Lo que he designado, aunque en forma simplificada, como la figura del maestro es de hecho una imagen de identificación compleja en la que se fusionan la anticipación de la propia muerte, los ancestros y el señor. A su vez, un guerrero será un día ancestro para sus descendientes y su vida se inscribe en la trama religiosa del culto a los ancestros. Sus incestos están vinculados con el servicio al señor, al que se vincula con una temporalidad donde predomina la continuidad pasado futuro. Un guerrero se identifica con esa imagen compleja del ideal de guerrero donde se actualiza la relación sacralizada de los ancestros al linaje de os señores. Esta imagen es un tanto mas pesada cuanto mayor es el afán de ser un guerrero digno y honorable. En otras palabras, en la profundización de su arte el guerreo persigue esa imagen idealizada con tanta mas intensidad cuanto más se identifica con ella. La perseverancia y la repetición en su practica marcial diaria son una lucha contra esta persecución . Este proceso tiende a generar una regularidad sin falla tanto tanto en el cumplimiento de los deberes la servicio del señor como en la repetición intensiva delas técnicas en artes marciales.

En la vida de un guerrero el kata del arte marcial forma parte de esa estructura. Cuando la imagen del maestro se integra en valores sagrados, la búsqueda técnica tiende a la perfección.

Fuente: Miyamoto Musashi-Kenji Tokitsu